El palacio del emperador Adriano en Tívoli, a pocos kilómetros de Roma, es un hermoso ejemplo de las grandes aportaciones de la arquitectura romana.

Se trata de un gran complejo residencia, con termas, bibliotecas, rodeado de jardines y agua, en contacto con la naturaleza. Es un lugar de reposo de un emperador, lejos del ruido y del movimiento de Roma.

El Teatro marítimo, circular, coronado por una cúpula, está rodeado de muralla y un canal de agua separado por un peristilo jónico. Es una zona privada de la residencia, pensada para el reposo del emperador, con su propia letrina y conectada a las termas.

Se organiza como una villa romana, con impluvium rodeado de estancias privadas. Es en esta isla circular, a la que se accedía por puertas de madera giratorias,  por  donde observamos el desarrollo del espacio interior romano. Se combinan y contraponen los espacios rectos y los espacios curvos, cóncavos y convexos, generando importantes claroscuros que nos acercan al mundo de lo escenográfico, de lo teatral, en consonancia con los estilos de la pintura pompeyana.

Este dinamismo en la concepción del espacio interior, representa la antítesis frente al estatismo de la arquitectura griega. En el arte romano se valoran las líneas curvas que se encuentran en la naturaleza, se trata de una arquitectura orgánica.

Para lograr este dinamismo característico de la arquitectura romana es necesaria la investigación sobre los nuevos materiales (hormigón, además del ladrillo y la piedra) y la incorporación sistemática de técnicas (arcos de descarga, arcos de medio punto, bóvedas, cúpulas etc.), todo ello utilizado en las diversas tipologías.

El romano presta una mayor atención al interior utilizando revestimientos lujosos de mármoles frente a un exterior de aspecto sobrio y humilde. Evoquemos, por ejemplo, el Panteón.

La villa de Adriano en Tívoli, como ocurrirá siglos más tarde en las villas campestres de Palladio en el Renacimiento, busca el placer. En estas, ya no serán los emperadores, sino el patriciado urbano y la nobleza , quienes encarguen estas residencias para el disfrute personal.

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